El hígado es uno de los órganos más sorprendentes del cuerpo humano: puede regenerarse incluso después de perder un 70% de su masa. Esta propiedad lo convierte en único, y permite, por ejemplo, que una parte se trasplante con éxito.
Otros órganos también tienen capacidades regenerativas, aunque más limitadas. El intestino y la piel se renuevan con frecuencia, pero el cerebro o el corazón apenas pueden regenerarse.
Los avances en medicina regenerativa, con células madre y bioingeniería, buscan crear soluciones para órganos dañados o enfermedades crónicas.
Fuente: Mayo Clinic, National Institutes of Health (NIH), Nature